
En este artículo hablaremos sobre lo que puedes comer con una dieta proteica. Enumeraremos todos los productos permitidos y, por supuesto, mencionaremos los que no lo están.
Una dieta proteica se considera tradicionalmente una de las formas más efectivas de perder kilos de más. Sin embargo, la popularidad de esta dieta no se debe sólo a su eficacia. Mucha gente admite que una dieta proteica les resulta bastante fácil. ¡Por supuesto, la sensación de hambre con un sistema alimentario de este tipo no representa ninguna amenaza! Una dieta relativamente ligera: proteínas.
Existen varios tipos de dietas proteicas. Por ejemplo, la famosa y controvertida dieta del Kremlin se basa en estos principios nutricionales. Pero sea cual sea el nombre de la dieta proteica, la esencia no cambia: una persona que quiera perder peso debe limitar drásticamente las grasas y los carbohidratos en su dieta, dando preferencia a los alimentos con proteínas.
Entonces, vamos a descubrir qué se puede comer con una dieta proteica. Empecemos.
¿Por qué funciona una dieta proteica?
Primero debes entender por qué las dietas proteicas son tan efectivas. Nuestro cuerpo necesita “combustible” para mantener sus funciones vitales. La principal "bebida energética" que proporciona saturación a largo plazo y le da energía son los carbohidratos. Los alimentos ricos en carbohidratos son ricos en calorías: toda la energía que no utilizamos durante el día "se almacena". Sí, sí, como ya habrás adivinado, esta reserva son los depósitos grasos: si de repente se producen periodos de hambre, son estas reservas las que evitarán que el organismo se debilite.
Si dejamos de comer hidratos de carbono, el organismo se ve obligado a compensar su deficiencia quemando la grasa acumulada. Si reducimos mucho nuestro consumo de alimentos ricos en grasas, no alimentaremos nuestra “reserva de grasa”. Como resultado, los odiados pliegues comenzarán a desaparecer, de los que antes era imposible deshacerse.
Pero no se puede vivir completamente sin comida, ¿verdad? Aquí es donde las proteínas, el principal material de construcción de nuestros músculos, vienen en nuestra ayuda. Por cierto, los deportistas siguen una dieta proteica durante el llamado "secado": gracias a ella, la grasa subcutánea desaparece, dejando al descubierto los músculos. El cuerpo se vuelve esculpido y hermoso.
Se recomienda combinar una dieta proteica con ejercicio físico, de esta forma podrás mantener el tejido muscular sin que se deteriore. La paradoja es que al cuerpo le resulta más fácil “ponerse a dieta” extraer energía de los músculos, dejando intactas las reservas de grasa.
¿Quieres tener la figura de un deportista sano y no de una persona demacrada? Así que no renuncies a la actividad física.
Principales alimentos de una dieta proteica

Desafortunadamente, la dieta que sigue una dieta proteica ni siquiera puede considerarse variada. El hecho es que no existen muchos alimentos ricos en proteínas.
Esto es lo que puede comer con una dieta proteica:
- Pez – Puedes elegir variedades marinas y fluviales. Sin embargo, debes asegurarte de que el pescado no sea demasiado graso.
- Carne – Es preferible favorecer las variedades bajas en grasas. Por ejemplo, si compras pollo, es recomendable comer su pechuga. La piel y los muslos deben dejarse en manos de otros miembros de la familia.
- Productos lácteos bajos en grasa. El requesón bajo en grasa es una excelente fuente de calcio y proteínas. Sin embargo, debes controlar la composición de los productos que compras. La inscripción “0% grasa” no significa que este producto pueda consumirse como parte de una dieta proteica. Por ejemplo, los yogures bajos en grasa suelen tener un alto contenido de carbohidratos. Como sabes, esta opción no nos conviene.
- Claras de huevo. Algunas dietas proteicas permiten el consumo de yemas de huevo.
¿Qué más puedes comer con una dieta proteica?
De acuerdo, masticar una pechuga de pollo mientras mastica claras de huevo es bastante aburrido. La dieta debe variarse con guarniciones. Se recomienda elegir ensaladas de verduras. Eso sí, conviene salarlos al mínimo y evitar cualquier aderezo que no sea zumo de limón. Y nada de mantequilla y menos aún de mayonesa.
Pero también es necesario elegir sabiamente las verduras saludables. Las siguientes verduras encajan mejor en el concepto de dieta proteica:
- repollo;
- tomates;
- pepinos;
- lechuga;
- apio.
Los productos de harina, los dulces y los alimentos ricos en carbohidratos deben excluirse por completo de la dieta. Por cierto, este último también incluye frutas. Aunque comer una manzana verde al día es completamente aceptable.